Este truco te permitirá mantener tu pollo fresco sin necesidad de congelar y comestible hasta por un año.
Ingredientes:
- 4 kg de pollo
- 4 cucharaditas de sal
- Pimienta negra, al gusto
- Pimentón, al gusto
- 4 cucharadas de vinagre
- 4 cebollas grandes
- Un manojo de perejil
Otros ingredientes que necesitarás
- Latas de 1 litro o frascos de vidrio
- Un paño o toalla limpia
Instrucciones:
Paso 1
Lo primero que debes de asegurarte es que el pollo esté bien enjuagado y limpio, escurrir y colocar sobre toallas limpias y secar. Transfiera el pollo a una ensaladera grande, luego agregue 4 cucharaditas de sal, pimienta negra y pimentón al gusto, así como 4 cucharadas de vinagre, y mezcle todo bien. Frote los condimentos sobre todos los trozos de pollo hasta que estén bien cubiertos, luego reserve. Pica las cebollas y el perejil, luego revuelve y reserva. Tome el frasco de vidrio limpio y seco, luego llene el fondo con cebollas y perejil, y agregue aproximadamente 3 piezas de pollo.
Paso 2:
Agregue más cebolla y perejil encima, luego coloque algunos trozos más de pollo y cubra bien con la tapa. Repita esta rutina con el resto del pollo, luego coloque una olla en el fuego y coloque una toalla o un paño en el fondo para que el vaso no explote. Coloque los frascos llenos en la olla, llénela con agua fría hasta que los frascos estén completamente cubiertos y déjelo hervir a fuego medio. Una vez que termine de hervir, reduzca el fuego a bajo, luego cocine a fuego lento durante unas 5-6 horas y deje enfriar en la olla. Una vez enfriados, retira los frascos de la olla, límpialos con una toalla y guárdalos en un lugar o almacenamiento a una temperatura que no supere los 10 °C durante un máximo de un año.