Cultivar nueces de pecán a partir de semillas es un proceso relativamente sencillo, aunque requiere paciencia y algunos cuidados específicos. Aquí te indico los pasos básicos para hacerlo:
- Obtención de semillas: Consigue nueces de pecán frescas y sanas. Puedes conseguirlas en tiendas de productos agrícolas o directamente de los árboles si tienes acceso a ellos.
- Preparación de las semillas: Remoja las nueces en agua tibia durante 24 horas para ablandar la cáscara y facilitar la germinación.
- Selección de la ubicación y preparación del suelo: Elige un lugar con pleno sol y un suelo bien drenado. Las nueces de pecán necesitan un suelo profundo y fértil para crecer adecuadamente. Prepara el suelo cavando un agujero de al menos 60 cm de profundidad y 60 cm de ancho, y mezcla compost o materia orgánica para mejorar la calidad del suelo.
- Plantación: Planta las semillas de nuez de pecán a una profundidad de aproximadamente 5 cm en el suelo preparado, con la punta hacia abajo. Deja un espacio de al menos 10 metros entre cada nuez, ya que los árboles de pecán tienden a crecer bastante.
- Riego: Mantén el suelo ligeramente húmedo, pero no empapado. Riégalo regularmente, especialmente durante los primeros meses después de la siembra, para ayudar a establecer las plántulas.
- Cuidado posterior: A medida que las plántulas crecen, asegúrate de eliminar las malas hierbas que compitan por los nutrientes y el agua. También puedes aplicar un fertilizante equilibrado en primavera para promover un crecimiento saludable.
- Protección contra plagas y enfermedades: Mantén un ojo vigilante en tus plántulas de nuez de pecán para detectar signos de plagas o enfermedades. Si es necesario, aplica medidas de control orgánicas o químicas según sea apropiado.